Brevísimos de sábado (18-10-08)

Oid mortales

por Adrián Alvarado

Dicen los que dicen que saben que escuchar es una virtud y para escuchar ciertas cosas hay que ser virtuoso porque la verdad es que da mucha bronca tener la oreja disponible cuando alguien dice, y acá, nadie se priva de decir, porque todos tienen una opinión formada de cada cosa que pasa, pasó o va a pasar, comúnmente empiezan diciendo: Mirá, yo de economía entiendo poco, pero esto de la crisis financiera para mi, bla, bla, bla, y resulta que el chabón o la chabona tiene una teoría propia del tema hecha con fragmentos de teorías ajenas que escuchó o leyó por arriba en Internet, es una suerte de patchwork, que sería algo así como hacer una cosa sola con pedazos de otras cosas, como el monstruo de frankestein, o ese cobertor horrible que te regaló tu mamá.

La gente habla porque necesita hacerlo, hablar es tan necesario como lastrar, tener sexo o trabajar, hablando se entiende la gente, hablando se conoce la gente. Quien escucha más de lo que habla descubre que casi todo el mundo dice lo que piensa en el momento que abre la boca mientras piensa lo que está diciendo y así nos comunicamos, así nos deschavamos. En otras palabras, siempre se puede decir lo mismo pero distinto, por eso la radio como los libros y los diarios nunca van a pasar de moda, por eso vos estás escuchando esto a esta hora; habiendo tantas cosas que escuchar vos elegís escuchar alguien hablando, y lo que tiene de bueno la radio es que no te transforma en un receptor totalmente pasivo, vos podés, putear, gritar, enojarte, estar de acuerdo o simplemente ignorar a esa persona que habla al micrófono, esto no significa que tengas una participación directa, de hecho, no existe la participación directa del publico en un programa de radio, podés reclamar, dejar un mensaje, incluso, si tenés suerte, podés salir al aire desde el teléfono pero nunca vas a compartir la mesa con los integrantes de un programa, porque en realidad, ellos solo quieren ser escuchados y mientras mas orejas cautivas tengan mejor, ese es el objetivo de cualquier programa de radio, ese es el objetivo de cualquiera, hacerse escuchar.

Primero hay que saber callar, después oír, después decir y al fin andar sin pensamiento.


Opiná sobre este tema

Titulo:
Comentario: (no más de 500 palabras please)
Firma:
E-Mail:
¬ Anterior Ir a la Portada Siguiente ®