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     "Hay pueblos que nacen para hacer historia y otros pueblos para padecerla" (Nietzche)

Cuidado con el perro

     Hoy ya lo sabemos, ahora habrá que aprenderlo de memoria, como dice Caparrós: "...cuando un Estado se deshace, cuando abandona todos sus deberes, el agua se descontrola y mata..."

     Pero como hay tantas formas de morir y hasta de vivir muriendo, es válido tener presente todo lo concerniente al día después, la reconstrucción.

     La problemática es compleja y demasiado sensible como para que sólo quede en manos de las autoridades de turno.

     Arturo Bonín diría: "..tratar de entender que no pesa sobre nosotros una maldición bíblica,sino la mala fe disfrazada de inoperancia de los canallas de turno".

     Entonces, recordando a Descartes ¿por qué repetir los mismos errores si hay tantos nuevos por cometer?

     Juan José Morín estimó en $ 25.000 el costo de cada viienda a ser reconstruida (El itoral 16/5/03, pág. 5) y de un primer informe que daba cuenta de péridas por u$s 200 millones,hoy estamos hablando de u$s 1.500 millones y después, quién sabe. No hay que perder de vista quienes hacen las estimaciones, manejan las estadísticas, reasignan las partidas y siguen manejando aquello que jamás les interesó: el bien público, el destino de los más en la provincia.

     Hay que permitirse dudar e investigar acabadamente todo lo que se pretende hacer, especialmente en razón de quienes son y estarán a cargo.

     Cabe recordar que EEUU primero hace el negocio de la guerra y luego está en primera fila al momento de la reconstrucción. El gobernador supo comparar el desastre con las torres gemelas y de ahí el escalofrío. Ojalá el ejemplo sea desgraciado.

     Entonces habrá que preguntarle al padre Rosso de "Los sin Techo", respecto de los costos reales de construcción solidaria, especialmente en atención al alto índice de desocupación en nuestra provincia. No dejemos que sea sólo un negocio más de las grandes empresas constructoras y grupos vinculados al poder.

     En el año 2000 leí en la revista Veintitrés que en una localidad de Entre Ríos, un grupo de concejales, construía casas -mediante un sistema solidario de participación- a un costo de $ 2000.

     Un grupo de alumnos del Colegio Carlos Cassaffonsth, de Córdoba, ganaron las Olimpíadas de la Construcción de 1999,en Mar del Plata. El proyecto presentado fue un barrio cerrado, al estilo country, pero de bajo costo, dedicado a sectores de ingresos medios y bajos: el presupuesto de cada vivienda fue de $ 8.000.

     Tanto el valor de $ 2000, como éste último de $ 8.000 eran antes de la devaluación, pero convengamos que en el rubro no todos los insumos son importados y los costos no se miden en forma lineal sino en atención a su participación relativa y efectiva en todo el proceso productivo, lo que llevaría los valores descriptos a menos de $ 4000 en un caso y menos de $ 16.000 en el otro, lo que dista bastante de la estimación de Morín.

     El gobernador decía a El Litoral del19/5/03: "...tengo que hacer de gobernador, de intendente, de psicólogo, andar por los barrios...".

     ¡¡¡¡¡¡No vaya a ser que nos quiera cobrar un suculento plus por ello!!!!!!

     Total después, su Fiscalía de Estado, dirá tal como contestó el amparo por las carpas: "...desconoce si hay movimientos de gente de centros hacia carpas, y que si algunos evacuados están en carpas es porque ellos quisieron ir alli".(El Litoral 19/5/03)

     Será porque nadie les avisó que se encontraban disponibles los mejores hoteles de la ciudad y las casas quintas de los funcionarios.

     Si eficacia y efectividad, entendidos en función del bienestar general, estuvieron ausentes durante los últimos veinte años en estas pampas, cabe recordar lo que nos decía Albert Camus: "El primer acto de libertad es decir NO frente a lo inaceptable..."

     De nuevo: CUIDADO CON EL PERRO........

Norma Del Centro

M. del H.:

Querida Señora Del Centro: A pesar de que lo hemos pensado y repensado no hemos podido deducir si Del Centro es su apellido o si apenas se trata de una consideración geográfica.

Para colmo el título de su nota nos llevó a una discusión sobre la metáfora aludida. Algunos de los integrantes de nuestro equipo de producción intuyeron que usted estaba comparando a los funcionarios con perros, lo cual los incitó a iniciar una campaña en defensa de esos pobres animalitos. Los perros, obviamente.

Otros se inclinaron más benévolamente por interpretar que usted se refiere con una elegancia envidiable a aquella vieja formulación vulgar sugiriendo que planean meternos el perro, y optaron por resolver el asunto con un caluroso aplauso.

Hasta la próxima.

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